domingo, 23 de febrero de 2020

No es posible una megaminería sustentable - Declaración de investigadores del Conicet



La megaminería tiene consecuencias negativas sobre la salud de las poblaciones aledañas a las explotaciones, no contribuye significativamente al desarrollo económico local y puede afectar el crecimiento de otras actividades no contaminantes.

Por Matías Blaustein(1), Federico Giovannetti(2), Florencia Aranciba(3), Nicolás Fernández Larrosa(4), Juan Wahren(5) y Cecilia Rikap(6)

Los últimos días de diciembre, el pueblo mendocino salió a la calle contra la modificación de la Ley 7722. Esta prohíbe la utilización de cianuro, mercurio, ácido sulfúrico y otras sustancias tóxicas en explotaciones mineras y también protege el agua. Esto significó un nuevo hito en un largo proceso de conflictividad sobre la actividad minera y sus implicancias socioambientales.



El eje del debate giró en torno a un tipo particular de explotación y no cualquier tipo de minería: la megaminería o minería metalífera a cielo abierto. Esta, a diferencia de la minería tradicional, está prohibida en muchos lugares del mundo por sus ya comprobados irreversibles efectos debido al uso de tóxicos como el cianuro. En Argentina, la megaminería se practica desde los años ‘90 y sólo siete provincias la permiten. En otras siete, la actividad fue prohibida gracias a la resistencia de los pueblos afectados.
En un renovado intento por ampliar la frontera de estas explotaciones, se procuró forzar su habilitación en provincias donde el rechazo social ya había logrado plasmarse en resguardo jurídico. Sin embargo, a pesar del freno logrado a la modificación de la ley mendocina, los intentos para cambiar la ley y permitir la megaminería continúan en Mendoza, Chubut (ley 5001) y en todo el país (como la embestida contra la Ley Nacional de Glaciares, que prohíbe la megaminería en zona glaciar y periglaciar).
En este contexto, circulan en medios diversos argumentos que generan confusión y pueden favorecer una nueva avanzada de la megaminería. No creemos que exista una intención de buscar una minería alternativa y “sustentable”, sino de hacer pasar a la megaminería como lo que no es. Como respuesta, hemos escrito, junto a otros científicas/os e investigadores del CONICET y Universidades, una declaración que refuta estos argumentos y expresa una fuerte preocupación por las consecuencias que la megaminería tiene sobre nuestra salud y nuestros territorios.
- “La megaminería ‘bien hecha’ puede no tener efectos dañinos en el medio ambiente y la salud pública”. Falso. Las técnicas utilizadas tienen un alto impacto socio-ambiental. Mediante la utilización de explosivos se producen voladuras de montañas que permiten remover grandes volúmenes de roca donde se encuentra el mineral de interés. Se aplican tratamientos químicos que separan los minerales de la roca y los desechos se descartan en diques de cola, extensos cuerpos de agua artificiales dónde se depositan los millones de litros de agua con químicos tóxicos. El drenaje ácido, las filtraciones de los diques de cola en las napas y los ríos, así como otras formas de contaminación, son efectos comprobados, tal como sucedió con los derrames tóxicos en San Juan, Minas Gerais (Brasil) y Mar de Cortés (México).
Esto conlleva: 1) La degradación del paisaje y del suelo de forma permanente, la presencia de partículas en el aire y contaminación sonora. 2) La utilización y contaminación de grandes cantidades de agua en zonas en las que generalmente hay escasez de esta. 3) La exposición prolongada en el tiempo de las poblaciones aledañas a las sustancias químicas utilizadas, que implica mayor riesgo de enfermedades crónicas respiratorias, cáncer de pulmón, enfermedades renales, de la sangre y de la piel, entre otras. A la exposición crónica se suma la exposición aguda, producto de "accidentes" como derrames, accidentes de transporte, rotura de caños, o emisiones de los diques de cola, que producen trastornos cardiovasculares, respiratorios y del sistema nervioso central, entre otros.
- “La megaminería genera desarrollo, empleo y diversificación de la economía regional”. Falso. En los últimos 22 años (OEDE, 2018), la minería ha generado solamente el 1,15 por ciento del empleo total (en comparación con el 5,9 por ciento de la ganadería, agricultura y silvicultura). La megaminería también tiende a destruir el empleo al tener un impacto negativo en otras actividades locales, aumentando también los niveles de pobreza. A su vez, las explotaciones de minas y canteras aportaron sólo el 2,95 por ciento del Valor Bruto de Producción total en Argentina desde el 2004 hasta el 2018 y, dentro de estas, la megaminería incidió en solo 0,49 por ciento (en comparación con el 6,95 por ciento que aportó la ganadería, agricultura, caza y silvicultura; según los informes del INDEC, 2019).
- “Quienes critican a la megaminería no plantean alternativas de desarrollo local”. Falso. Se han ido construyendo diferentes alternativas de desarrollo local de acuerdo a las particularidades de cada región. Un ejemplo es la promoción de actividades preexistentes (como la vitivinicultura, olivicultura, fruticultura, turismo, etc.) con una perspectiva agroecológica o en consonancia con el ambiente y las necesidades de las comunidades locales. Estas actividades tienen una alta potencialidad para desarrollarse en los territorios y contribuir a su diversificación productiva. Lo mismo ha ocurrido con la propuesta de las energías renovables, por parte de poblaciones que se enfrentan al fracking, o la agroecología, que se impulsa en simultáneo a las luchas contra los impactos socioambientales del agronegocio.
En síntesis, las experiencias históricas y las evidencias científicas disponibles llevan a la conclusión inequívoca de que la megaminería (al igual que otras actividades extractivas) atenta gravemente contra la salud y el ambiente de las sociedades donde se instala. Por esto, el objeto del debate no debería ser el modo de habilitar la megaminería allí donde está prohibida, sino la necesidad de extender la salvaguarda de la prohibición de esta explotación a todo país. Para esto, es fundamental involucrar al conjunto de nuestro pueblo en las decisiones políticas relativas tanto al desarrollo de la megaminería como de cualquier otra actividad contaminante.
(1) Dr. en Biología. iB3-Dpto. de Fisiología y Biología Molecular y Celular-UBA, Investigador de CONICET
(2) Lic. en Psicología. Unidad de Neurobiología Aplicada, CEMIC, Becario de CONICET
(3) Dr en Sociología. CENIT-UNSAM, Investigadora de CONICET
(4) Dr en Biología. Instituto de Fisiología, Biología Molecular y Neurociencias-UBA,Investigador de CONICET
(5) Dr. en Cs. Sociales. Instituto de Investigaciones Gino Germani-UBA, Investigador de CONICET
(6) Dra. en Economía. IICE-UBA. Investigadora de CONICET


viernes, 11 de noviembre de 2016

MEGAMINERÍA A CIELO ABIERTO Y CONTAMINACIÓN




Partes de una mina a cielo abierto que son potenciales fuentes de contaminación:

    A) Tajo o rajo

    B) Escombrera

    C) Dique de colas


  En la megaminería a cielo abierto se explotan yacimientos de minerales diseminados en los cuales pequeñas cantidades de mineral se encuentran dispersas en grandes volúmenes de roca. Ejemplos: Veladero en San Juan (oro y plata), cerro Vanguardia en Santa Cruz (oro y plata), Bajo de La Alumbrera en Catamarca (cobre, oro y molibdeno).

                         Imagen satelital de Bajo de La Alumbrera en la provincia de Catamarca


1) Prospección:

  Son los estudios previos en donde se determina qué minerales se encuentran en ese yacimiento y se calcula la cantidad de cada uno de ellos. Con estos datos se evalúa si conviene realizar la explotación es decir si ese yacimiento es económicamente viable.

  Con la suba de precios internacionales de los metales en los últimos años, los yacimientos de minerales diseminados que hasta hace unos años no convenía explotar, desde la segunda mitad del siglo veinte se volvieron  altamente redituables. En nuestro país esto se ve favorecido por las leyes sancionadas durante el gobierno de C.S. Menen y que aún están en vigencia.


2) Explotación :
   
  Tajo o rajo a cielo abierto: En primer término se extrae la roca portadora de los minerales mediante voladuras sistemáticas de la montaña o cerro lo que genera un tajo o rajo a cielo abierto. Este enorme cráter se va profundizando a medida que avanza la explotación (pueden llegar a más de 150 hectáreas de superficie y más de 500 metros de profundidad).

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CONTAMINACIÓN en el tajo por drenaje ácido: Al exponer la roca a la intemperie en contacto con el aire y el agua de lluvia o de alguna napa que se atraviesa cuando se profundiza el tajo se genera drenaje ácido. De todos los contaminantes de los cursos de agua, quizás el drenaje ácido de mina (en inglés Acid Mine Drainage o AMD) sea uno de los más graves, por su naturaleza, extensión y dificultad de resolución. Los ríos y acuíferos afectados por este tipo de contaminación se caracterizan por su acidez, así como por el alto contenido en sulfatos y metales pesados de sus aguas y por el contenido metálico de sus sedimentos. En la naturaleza, los sulfuros permanecen en el subsuelo en ausencia de oxígeno y sólo una pequeña parte de estos depósitos aflora a la superficie. El drenaje se forma cuando los minerales que contienen azufre, principalmente la pirita (FeS2), se ponen en contacto con la atmósfera, produciendo su oxidación y formando ácido sulfúrico y hierro disuelto. Estas reacciones generan acidez y liberan grandes cantidades de sulfatos, hierro y otros metales que contienen los sulfuros (As, Cd, Co, Cu, Pb, Zn, etc.), produciendo una mezcla tóxica (lixiviado). Este lixiviado reacciona con las rocas del entorno produciendo la hidrólisis de otros minerales y haciendo que se disuelvan otros elementos como Al, Ca, Mg, Mn, Na, Si, etc. (1)


CONTAMINACIÓN del aire por las voladuras: se produce por dos motivos:
a) Los explosivos despiden a la atmósfera gases que contaminan el aire porque son altamente tóxicos (por ej. El explosivo ANFO: Amonium Nitrate-Fuel Oil, que es a menudo usado en minería libera N2O: óxido de dinitrógeno que es considerado un residuo peligroso, es un gas de efecto invernadero que tiene un potencial de efecto invernadero tres veces mayor que el CO2, con dos voladuras diarias se liberan a la atmósfera más de 5 toneladas diarias de N2O).
Para producir las voladuras también se utilizan emulsificantes y detonantes que pueden liberar sustancias peligrosas (por ej. Algunos detonantes tienen aluminio y generan nanopartículas de aluminio que entrañan graves riesgos para la salud como cáncer de pulmón)

                         
b) Las partículas generadas por las voladuras de roca son de distintos tamaños, son perjudiciales para la salud las más pequeñas (menores de 10 micrones) porque quedan suspendidas en el aire y al respirar en forma continua pueden provocar silicosis, asma, cáncer de pulmón, problemas cardiovasculares, etc., y las menores de 0,5 micrones son aún más peligrosas porque generan una nube con partículas en suspensión que pueden permanecer desde días a semanas, son llevadas por los vientos en distintas direcciones y no se depositan en el suelo hasta que no se produce una lluvia (esto ha sido descripto por el geólogo Juan Pablo Milana en la nota Una nube llamada Gualcamayo disponible en: https://sites.google.com/site/megamineriacontaminante/home?pli=1):                                  

                                     


  Escombrera: una vez que se realizan las voladuras se separan los pedazos de roca portadora de los minerales de los fragmentos de roca estériles. Estos escombros estériles van a formar la escombrera, que en el transcurso de la explotación va a constituir grandes montañas de muchas toneladas de peso y un gran volumen.
CONTAMINACIÓN en la escombrera de las aguas subterráneas y superficiales por drenaje ácido: Al igual que en el tajo los grandes volúmenes de roca expuestos a la intemperie generan drenaje ácido (AMD) que se puede infiltrar y contaminar las aguas subterráneas y se puede escurrir superficialmente y contaminar arroyos y ríos.(1)

La roca útil se muele hasta alcanzar el tamaño requerido para ser tratada con sustancias químicas que permitan separar los distintos minerales y metales, en el caso del oro el tratamiento se llama lixiviación con cianuro. Se coloca la roca triturada en una plataforma y es rociada con una solución con cianuro que amalgama el oro que se filtra.

  Dique de colas: el residuo altamente contaminado con cianuro en el caso del oro, resultante del proceso de lixiviación es depositado en un dique que se construye para tal fin aprovechando la geografía de la zona: es el dique de colas. Algunas veces el piso del dique se impermeabiliza con membranas pero ya en el proceso de colocación se producen roturas debido a lo irregular del terreno y a la presencia de rocas con bordes afilados, por lo tanto estas membranas no impedirían las filtraciones.
CONTAMINACIÓN en el dique de colas por cianuro u otras peligrosas sustancias químicas: Se puede producir la contaminación de las aguas subterráneas, de los cursos de agua superficial como ríos y arroyos, y de los suelos
     a) Filtración de líquido de las colas a través del piso, de la pared o de su fundación, las sustancias químicas altamente tóxicas se infiltran en el terreno y contaminan las aguas subterráneas.
     b) El muro de contención del dique de colas puede ser superado por una lluvia o nevada excepcional generando una contaminación de los cursos de agua (como en Baia Mare, Rumania, en el año 2000, donde se rebalsó el dique de colas por fuertes lluvias y nevadas y se contaminaron varios ríos que llevan sus aguas hasta el Danubio donde hubo gran mortandad de peces afectando a tres países Rumania, Hungría y Yugoslavia).
    c) El muro de contención del dique de colas puede ceder y generar contaminación del suelo (como en España, en 1998, donde cedió parte del dique de colas de la mina de Boliden en Aznalcóllar (Sevilla) y  se vertieron 4.500 millones de litros de agua y lodos sobre los 5.000 kilómetros cuadrados del Parque Natural de Doñana. Tal cantidad de lodos arrasaron con cultivos, ganado y peces). 
    d) El muro de contención puede romperse por efecto de un movimiento sísmico.

 Cuando se termina la explotación de una mina quedan el tajo, las escombreras y el dique de colas que seguirán contaminando por cientos de años y será el estado el que deberá encargarse de remediar los daños ocasionados al medio ambiente y a la población. 

AGUA


  Las explotaciones mineras a cielo abierto necesitan agua en grandes cantidades para el proceso de separación de los minerales, se emplean diariamente decenas de millones de litros, por ejemplo en Bajo de La Alumbrera, Catamarca, se utilizan 95 millones de litros de agua por día, la cual se contamina con los químicos usados en el proceso. Por lo tanto esa agua no puede ser destinada para consumo humano, ni para el ganado, ni para riego, con el consiguiente perjuicio a los pobladores de la zona. Además, se debe tener en cuenta que las mineras utilizan el agua de los ríos y arroyos o directamente de los glaciares que alimentan a esos ríos y arroyos indispensables para la vida de los seres humanos y para la fauna y flora autóctonas.  
  
Bibliografía

 Drenaje Ácido de Minas: EcoAmérica/mayo2007/: http//www.ecoamerica.cl/pdf_notas/67/eco67_18-21.pdf
Voladuras:
Dictamen Sectorial Consejo Provincial del Ambiente Proyecto Minero San Jorge (Expediente 371-M-08-1583) Provincia de Mendoza. (Págs. 12-13)
Universidad Nacional de Cuyo: Informe sobre Proyecto Minero San Jorge, mayo 2010. (Págs. 18-20)
Dique de colas:
Romania cautious on cyanide risk: news bbc.co.uk/2hi/europe/642258.stm
Aguilar, J.; Dorronsoro, C.;Fernández, E.;Fernández, J.García, I.; Martín, F.; Ortiz, I.; Simón, M. El desastre ecológico de Aznacóllar.: edafologia.ugr.es/donana/aznal.htm

sábado, 7 de noviembre de 2015

Drama en Brasil: una avalancha de lodo tóxico arrasó una ciudad

Tragedia.Se debió a la ruptura de dos diques que contenía desechos químicos de una minera en el estado de Minas Gerais. Se cree que hay decenas de personas enterradas bajo el barro. Previamente hubo dos pequeños sismos.




Nada peor en una tragedia, como la que conmueve a la ciudad de Mariana en Minas Gerais, que el retaceo de la información. Hoy por la mañana medio millar de personas fue recogida del pueblo de Bento Rodrigues, a 20 kilómetros de distancia de esta pequeña urbe histórica, que conserva en estado perfecto los caserones de la época de la antigua colonia portuguesa. Allí donde fueron alojadas los llantos no cesaban por los padres, hijos y nietos, de los que no se tienen noticias. Bento fue el epicentro de la desgracia: sus casas quedaron literalmente cubiertas por un lodo tóxico después que se rompieran dos diques de un embalse que contenía por los desechos químicos, aquellos que dejan las actividades mineras de la Vale, el mayor compañía brasileña del rubro.

La alcaldía, y la propia empresa, declararon oficialmente la muerte de una persona y la desaparición de otras 15. La Samarca, nombre de la firma subsidiaria de la Vale, dio cuenta solo de 13 operarios que fueron arrastrados por el mar de lama. El rescate de sobrevivientes, que continuaba con helicópteros, debió ser suspendida poco después del mediodía por una tempestad.
Pero el sindicato de trabajadores mineros y los pobladores de la localidad afectada dicen que la suma es muy superior. Hablan de decenas de personas enterradas por esa avalancha de barro contaminado. Un hombre de 70 años, Nascimento Jesus, que pasó la madrugada de hoy aislado en los techos de su casa, dijo que no había recibido ningún aviso de la Vale para abandonar el área donde se produjo la catástrofe. “Sólo supe lo que vendría cuando oí el barullo del agua. No perdimos la vida solo porque Dios se compadeció”.


La empresa emitió un comunicado sobre la ruptura de los diques. Afirma que esto ocurrió a las 15 horas. Si fuera tal como afirma la compañía, el terrible accidente podría estar vinculado a una serie de temblores en la región, que fueron registrados por sismógrafos de la Universidad de San Pablo, y que sucedieron media hora antes. Los técnicos de la minera dijeron que después de esos movimientos hicieron “testeos de los diques” y no vieron ningún problema derivado de los cimbronazos de la tierra.
Lo cierto es que el lodo contaminado, que se deslizaba por las barrancas montañosas, afectó varios distritos: Aguas Claras, Ponte do Grama, Paracatu y Pedra, además de Bento Rodrigues. Las inundaciones cubrieron varias manzanas de estas localidades, lo que habla de la violencia conque se desplazaba el río de barro. La visión de los lugares invadidos por el barro es poco menos que aterradora: apenas se ven los techos de las casas, “pintadas” por el lodo tóxico, y autos dados vuelta en el camino. Los habitantes del distrito de Parcatu contaron que apenas tuvieron minutos para abandonar el pueblo.
El Ministerio Publico de Minas Gerais informó que “esta es la peor tragedia ambiental vivida en nuestro estado”. Prometen que irán a investigar la “negligencia empresarial” que no hizo sonar las alarmas como corresponde en estos casos. Los vecinos que lograron salvarse contaron que “un camión pasó a los bocinazo: “El conductor gritaba desesperado: salta, salta. Muchos de nosotros pudimos agarrarnos del acoplado”. Pero hacia el final, ya no había espacio y muchos de los pobladores quedaron abajo.

Fuente:  Clarín.com, de Buenos Aires, Argentina. Por Eleonora Gosman, Corresponsal en Sao Pablo. 7/11/2015
 http://www.clarin.com/mundo/Brasil-lodo_toxico-Minas_Gerais-Mariana_0_1462654125.html

viernes, 6 de noviembre de 2015

Un pueblo en Brasil quedó sepultado bajo lodo tóxico: temen decenas de muertos

Ayer por la tarde, la rotura de dos diques que contenían residuos mineros se transformaron en un alud de desechos que desembocaron en el poblado de Bento Rodrigues, en Minas Gerais.

MARIANA, Brasil.- Un poblado del sureste de Brasil fue sepultado por un torrente de lodo tóxico tras la rotura, ayer, de dos diques que contenían residuos mineros, en una tragedia que dejó hasta el momento 17 muertos, aunque las autoridades temen que ese número aumentará hoy, mientras buscan sobrevivientes en medio de imágenes desesperantes.
Dos diques se rompieron ayer por la tarde, provocando un alud de desechos mineros que recorrió velozmente cientos de metros hasta desembocar en el poblado de Bento Rodrigues, a 23 kilómetros del centro de Mariana, una ciudad a 120 kilómetros de Belo Horizonte, la capital del estado de Minas Gerais.

El escenario en el poblado de 600 personas que quedó cubierto por el barro tóxico en un 80% era de destrucción total. La gigantesca ola de lodo rojizo arrastró camiones, coches y hogares y cubría hasta los tejados de las casas, según imágenes aéreas de la TV Globo y fotografías desde el lugar. Según el diario Folha de S. Paulo, 500 personas ya fueron rescatadas.
"La noche del jueves había 17 muertos pero se han encontrado otros cuerpos. Debido a las familias, que no están todas al tanto, no damos aún un nuevo balance. Habrá que esperar un poco", dijo hoy el comandante de bomberos de la ciudad de Mariana, Adao Severino Junior.


Según indicaron los bomberos, los afectados fueron sometidos a un proceso de descontaminación de hierro mediante el uso de agua y jabón. Los sobrevivientes fueron trasladados a un polideportivo convertido en un albergue improvisado y la alcaldía de Mariana decretó estado de "calamidad pública".
El distrito de Bento Rodrigues tenía cerca de 200 casas y albergaba unas 612 personas, según datos oficiales de 2012.

"Un film de terror"

"Vivimos un film de terror. Las personas comenzaron a correr, gritaban que se acababa el mundo y el agua venía de todos lados", contó una sobreviviente que no quiso identificarse al portal G1 de Globo.
Un adolescente de 15 años que como otros 150 sobrevivientes está refugiado en un gimnasio de Mariana contó al diario Folha de S. Paulo que escapó trepando por los tejados.
Primero, Marcos Júnior de Souza escuchó a su vecina gritar que un dique había reventado. "Como mi vida entera escuché que el dique iba a quebrarse, no le di importancia. Hasta que vi el agua invadir mi casa", dijo.
"Salí por la ventana, subí al techo y fui saltando de tejado en tejado" hasta llegar a una colina, relató.

La minera

La minera Samarco, responsable de las actividades en el área, informó en un comunicado de que "no hay confirmación de las causas y la completa extensión de lo ocurrido", pendiente de las investigaciones.
Samarco, una filial conjunta de la brasileña Vale con la australiana BHP, señaló que la revisión realizada en julio de 2015 no encontró ningún fallo en la seguridad de las barreras.
"Movilizamos todos, absolutamente todos los esfuerzos necesarios para priorizar la atención y la integridad de las personas que estaban trabajando en el local o que residen próximo a los diques", dijo el jueves de noche el presidente de Samarco, Ricardo Vescovi, en un video publicado en Youtube.
"Tampoco estamos midiendo esfuerzos para la contención de daños ambientales", precisó, sin dar información sobre las víctimas.

Fuente: Clarín.com - 06/11/2015.
 http://www.clarin.com/mundo/Muertos-desaparecidos-Brasil-avalancha-residuos-toxicos_0_1462653925.html 

martes, 6 de octubre de 2015

EL DERRAME DE LA BARRICK ENVENENÓ EL AGUA DE JÁCHAL

Estudio realizado por el Laboratorio de Análisis Instrumental de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de CUYO, por encargo de la Municipalidad de Jáchal. 
EL DERRAME DE LA BARRICK ENVENENÓ EL AGUA DE JÁCHAL
03 OCT 2015, 22:21. Por: Jorge Fernández Rojas.

La municipalidad del departamento sanjuanino solicitó, a pedido de los vecinos, un estudio técnico sobre el agua de los ríos de la zona. Así se detectó contaminación con metales en dosis de hasta 1400 % por encima de los valores tolerables.

Imagen representativa de una toma de muestra en un río para análisis. Foto publicada por Mining Press Argentina.

Ahora se sabe que al otro día de aquel vertido furtivo de agua con cianuro de la mina de Veladero en San Juan, se comprobó la contaminación en los ríos de deshielo con metales pesados peligrosos para cualquier tipo de vida en la zona, como arsénico, aluminio, manganeso, boro, cloruros y sulfatos.
Además, ahora también se conoce por un estudio microbiológico que hay bacterias muy nocivas y difundidas, como la escherichia coli, donde se originan los cauces de agua montañosos.
Ya pasaron 20 días desde que se desató el escándalo por el derrame de agua con cianuro originada por una válvula rota de una cañería del sistema industrial instalado por la minera Barrick Gold en plena cordillera sanjuanina.

Aquel WhatsApp que espabiló a Jáchal

Fue en la noche del domingo 13 de septiembre a través de una cadena de WhatsApp que denunciaba un peligroso vertido de unos 15 mil litros de agua cianurada en los afluentes del río Jáchal. Aquella noche fue impasible. El intendente de Jáchal, Jorge Barifusa (FPV), convocó a Saúl Zeballos, un contador público y vecino reconocido de la ciudad de San José de Jáchal, la ciudad cabecera del departamento sanjuanino, para que integrara el comité de crisis. Zeballos fue designado para hacer el contacto con los técnicos de la UNCUYO para encarar el monitoreo.
Con el correr de los días se vislumbró que aquel mensaje viralizado por la red social, que inquietó a los jachalleros, se quedó corto. La misma Barrick Gold, la empresa de capitales canadienses que explota la mina, admitió primero que fueron 224 mil litros los que se “escaparon” por los cauces naturales. Finalmente se confirmó que fueron un millón de litros los derramados.
Luego comenzó una andanada de informes de organismos oficiales que afirmaron la ausencia de cianuro en el agua del río Jáchal, el principal cauce que recolecta el agua de deshielo de la región donde se encuentra la mina metalífera, “aguas arriba”.
La minera y el Gobierno promueven –y cuando no, sponsorean– varias publicaciones, con mucha penetración en la comunidad, donde se esgrimen estudios que desmienten cualquier tipo de contaminación repitiendo que “no hay cianuro en el agua”.
 
La historia del informe de la UNCUYO
Una crónica del sitio lavaca.org del viernes 2 de octubre, luego replicada por el sitio local Explícito, aseguraba que los vecinos y asambleístas del departamento de Jáchal contaban con un informe de la UNCUYO que confirma la existencia de metales en el agua de los afluentes del río Jáchal. Efectivamente, el estudio fue realizado por el Laboratorio de Análisis Instrumental de la Facultad de Ingeniería de la UNCUYO y la responsable del peritaje es la química María Esther Barbeito. El trabajo se realizó por encargo de la Municipalidad de Jáchal y las muestras fueron tomadas, de acuerdo con el relato, desde la localidad sanjuanina al otro día de conocido el siniestro. Esa tarea fue fundamental para los análisis.
Ya había un antecedente con el laboratorio de la Facultad de Ingeniería de la UNCUYO en el año 2010, cuando se hicieron los primeros controles pedidos por los vecinos jachalleros. Ahora, ante la emergencia, Zeballos volvió a convocar a los expertos para un nuevo peritaje.
“Acompañé a la delegación de la Universidad para tomar las muestras y lo hicimos en los mismos puntos de hace unos años, para comparar aquellos valores con estos actuales. Cuando llegamos a la zona de la primera muestra, en el río La Palca, antes de que se una con el río Blanco, nos dimos cuenta de que algo grave había pasado porque había gente de la mina tomando muestras del agua. Finalmente, con el análisis, comprobamos que estaba contaminada”, dijo Zeballos aUnidiversidad este sábado 3 de octubre.
También se tomaron muestras de agua en el curso de los ríos Potrerillos, Las Taguas, Blanco y el mismo Jáchal, a la altura del puente de Angualasto, y finalmente en los diques Cuesta del Viento y Pachimoco. Zeballos apuntó que, en la medida en que siguieron el curso del líquido, los resultados de los estudios denotaron que la aparición de metales en agua fue bajando hasta llegar a las represas, donde casi no se detectaron altos tenores de elementos o compuestos riesgosos.
Los metales verificados por el informe fueron en especial manganeso y aluminio. Estos metales se encontraron con valores muy elevados con repecto a lo permitido por ley nacional para el uso de riego y consumo animal, dato no menor si se tiene en cuenta que en la región hay importante desarrollo agrícola y se crían animales de granja.
 
Los metales en el agua
Se nota que hay gran desinformación o información parcial, que genera incertidumbre en la población. En este tironeo, se evidencia que el Gobierno de San Juan no suministra información oficial a los afectados y puntualiza que “no hay cianuro en el agua”. Con esa definición dice una verdad a medias. Veamos: decir “no hay cianuro” es lo mismo que decir: “no hay cianuro libre en el agua”. Eso significa que esa sustancia no se verifica en dilución con el agua, pero lo que no se dice es que ese cianuro se utiliza precisamente para reaccionar con los metales buscados por la Barrick –en este caso– para luego separarlos por procedimientos industriales complejos.
Es decir: con este estudio se ha logrado probar que el cianuro contaminó el agua de los ríos de la montaña sanjuanina al reaccionar con los metales pesados y peligrosos para la vida, y estos fueron arrastrados “aguas abajo”. Esa es la verdadera contaminación que ocasionó el derrame del domingo 13 de septiembre.    

Los datos alarmantes del análisis
Se detectaron 1,48 miligramos por litro (mg/l) de manganeso, cuando el promedio histórico en ese punto del río La Palca es de 0,25 mg/l de agua. De acuerdo con los datos puntualizados por el vocero sanjuanino, el valor máximo tolerado por la ley nacional para riego y consumo animal es de 0,2 mg/l de manganeso.
En tanto, en el caso del aluminio, se verificaron 70 mg/l y se habían medido a esa altura del río de 3 a 4 mg/l. El valor máximo tolerado según el informante por norma nacional de residuos peligrosos destinada para riego y consumo animal es de 5 miligramos por litro. Este último dato fue determinante para los asambleístas para continuar con la resistencia vecinal cuando el miércoles 30 de septiembre recibieron el informe de la UNCUYO. Además, siempre de acuerdo con el detalle que proporcionó Zeballos, se detectaron otros trazos metalíferos como mercurio, cobre y zinc.
Un párrafo aparte merece la evaluación que se hizo de las muestras que se tomaron de una fuente de agua para consumo humano en el pueblo Mogna, ubicado a 50 kilómetros de San José de Jáchal, en el camino hacia la ciudad de San Juan. Allí se encontraron metales en el agua que hacen que ese líquido ya no sea apto para el consumo de los habitantes del lugar.
Estas fueron las determinaciones químicas. boro: 6 mg/l (límite máximo aceptado: 0,5 mg/l);cloruros: 740 mg/l (límite máximo aceptado: 400 mg/l); sulfatos: 540 mg/l (límite máximo aceptado: 350 mg/l) y arsénico: 0,069 mg/l (límite máximo aceptado: 0,010 mg/l).
Lo que pasa en Mogna puede transformase en un caso testigo como una consecuencia histórica de la acumulación contaminante de la actividad minera a gran escala, como la que se produce en Veladero.

Apunta Domingo Jofré, referente vecinal y periodista de Radio Nacional en Jáchal, que en 2007 se dispuso de la provisión de agua potable a través de un acueducto para no tomar agua del río principal de la región. En ese momento se detectó, a dos años del inicio de la explotación minera, contenido de arsénico tanto como ahora se verifica en el agua de Mogna.
Otro dato preocupante es la aparición de la bacteria Escherichia coli, que se detecta en efluentes cloacales, lo que hace presumir que también se está vertiendo este tipo de líquidos en la zona más alta de los ríos.
 
La contaminación del clima social
La historia del informe de la UNCUYO que contradice a todos los publicados continuará como prueba de los vecinos ante la Justicia, donde se estudia el desastre ambiental que parece querer disimularse desde los estamentos privados y públicos.
Mientras tanto, Jofré, desde Jáchal, espera novedades y acciones desde fuera de la Provincia ante el clima social, que también parece contaminado.
"Necesitamos ayuda de otras provincias, acá ya no tenemos cómo sostener el reclamo. No tenemos información veraz y han aparecido algunos personajes acá en Jáchal preguntando quiénes son los cabecillas de la asamblea de vecinos. Tengo más confianza en lo que te estoy diciendo a vos por teléfono que lo puedo conversar aquí con gente que no conozco y aparecen haciendo preguntas raras”, detalló el periodista, preocupado.


Fuente: http://www.unidiversidad.com.ar/el-derrame-de-la-barrick-mato-el-agua-de-jachal

jueves, 24 de septiembre de 2015

Mina Veladero, el derrame de agua con cianuro que llegó al río Potrerillos superó el 1.000.000 de litros

Cianuro: admiten que el derrame fue 4 veces mayor a lo informado
Incidente en San Juan.Lo reconoció la minera Barrick Gold. La pérdida superó el millón de litros. Fue por una compuerta que quedó abierta.
Por Silvina Heguy
  Como si fuera un derrame lento de información, después de diez días, hoy Barrick Gold confirmó en un escrito ante el juez de San Juan que el derrame de agua con cianuro en la mina Veladero fue de 1.072.000 litros y que una compuerta que debía estar cerrada no lo estaba, lo que causó que la pérdida de la válvula llegara al Río Potrerillos.  
  La nueva cifra es casi cuatro veces mayor a la que la misma empresa había informado el jueves pasado en un escrito al gobierno de la provincia de San Juan y mucho mayor a la cantidad que se le había informado el domingo 13 a la medianoche a los pobladores de Jáchal cuando fueron alertados por Whatsapp del derrame. Esa vez, la cantidad informada había sido de 15.000 litros.
  El nuevo informe fue elaborado por los quince expertos que la minera envío desde Canadá el miércoles para reemplazar a la cúpula y empleados que ese día estaban trabajando en la mina de oro Veladero, a 4.200 metros de altura. El grupo a cargo de la planta ese día fue apartado temporalmente de la empresa hasta que la Justicia termine su investigación. El juez civil y penal de Jáchal, Pablo Oritja, es quien investiga si hubo negligencia y falta de mantenimiento de Barrick. Según la última hipótesis, la válvula falló alrededor de las ocho de la noche del sábado. Un informe interno registra una revisión de rutina a las 18 de ese día.
  La válvula es parte de un caño que lleva agua cianurada al llamado Valle de Lixiviación. Un área de casi 60 hectáreas en el que se vuelca ese líquido sobre las rocas extraidas de la montaña para separar el oro. Debajo de esa cañería hay un canal preparado para recibir posibles pérdidas, la que tiene compuertas que se abren manualmente para sacar la nieve que se acumula. Una de ellas permaneció abierta durante toda la noche y dejó que el agua con cianuro llegue al río. La pérdida fue descubierta a las 10 de la mañana del domingo y detenida a las 11.45. Durante esa hora se derramaron 224.000 litros. En el informe de Barrick del jueves, la empresa advirtió que no sabía cuando había comenzado la falla. Hoy reconoció que fue en la noche del sábado. En Jáchal se enteraron del derrame porque un empleado de la mina le envió un mensaje a su familia para que no tome agua. La noticia corrió en minutos por el pueblo de 22.000 habitantes. Ayer la inquietud seguía. Un grupo había viajado a San Juan, a 150 kilómetros, para informar a senadores nacionales que viajaron desde Buenos Aires para recolectar información.
  También en San Juan, expertos de Naciones Unidas presentaron un plan de monitoreo de 45 días. Hasta ahora no se ha encontrado restos de cianuro en el agua, pero el proceso de contaminación puede aparecer en etapas posteriores, advirtieron.
  Desde la Asamblea “Jáchal no se toca” piden que el gobierno provincial presente un informe formal sobre lo sucedido y qué está haciendo. El gobernador José Luis Gioja está acusado de haber ocultado información: ya que según la empresa fue informado el domingo al mediodía. Dos fiscales federales –Federico Delgado y Ramiro González– también presentaron requerimientos contra el gobierno provincial y nacional. Ahora los jueces federales Sebastián Casanello y Marcelo Martínez de Giorgi deberán decidir si siguen las causas. Las penas para los funcionarios irían entre los 2 y 6 años.

 Clarín, 24 de septiembre de 2015


Es interesante recordar esta noticia de La Nación del 24/02/2012, donde por un lado se reconoce el uso de cianuro en la actividad minera a cielo abierto y además se enfatiza que "no existe posibilidad de contaminación"

 La presidenta provisional del Senado, la kirchnerista Beatriz Rojkés de Alperovich (Tucumán), organizó ayer una jornada para que empresarios, sindicalistas, especialistas y legisladores realizaran una encendida defensa de la actividad mineray descalificaran los argumentos que organizaciones ambientalistas esgrimen contra la minería a cielo abierto que se desarrolla en provincias como San Juan, Catamarca y La Rioja.

  En medio de tanto apoyo a la minería, la única voz disonante fue la del senador radical Mario Cimadevilla (Chubut), quien desafió a los invitados a que vendieran sus patrimonios "por el 3% de su valor, que es lo que les queda a las provincias" en concepto de regalías. Ninguno de los presentes respondió.

  En el encuentro -al que asistió el jefe del bloque de diputados kirchneristas, Agustín Rossi-, no hubo invitados de organizaciones ambientalistas ni representantes de las poblaciones que protestan contra los emprendimientos cuestionados, como los de San Juan o Andalgalá.

 Sólo hubo posturas favorables a la explotación minera. Así, Mario Capello, secretario del Colegio Argentino de Ingenieros en Minas, calificó de "disparates" y de inducir "miedo en la gente" los argumentos en contra de la minería a cielo abierto. "No hay ninguna posibilidad de contaminación porque el cianuro se usa en circuito cerrado", afirmó.

Fuente:  http://www.lanacion.com.ar/1450866-claro-gesto-del-kirchnerismo-en-el-senado-en-apoyo-de-la-mineria-a-cielo-abierto

miércoles, 31 de julio de 2013

NO al Fracking en Argentina y el Mundo

Por favor compartir y firmar para que entre todos pongamos un freno a este método de extracción de petróleo y gas. 

El "fracking" es tanto o más peligroso que la minería a cielo abierto. La firma del contrato de YPF con Chevron es para explotar el yacimiento de Vaca Muerta con este método llamado " no convencional". 

Este método ya está prohibido en muchos países.





Este es el petitorio que podemos acompañar con nuestra firma en: http://argentinasinfracking.org/sumate/


NO a la fractura hidráulica o fracking (gas no convencional) en Argentina

CONTRA EL FRACKING

En los últimos tiempos, nuestro pais y  las diferentes provincias comenzaron a avanzar de modo ciego e imprudente en la exploración y explotación del gas y petróleo no convencional, con la controvertida metodología de la fractura hidráulica o fracking. Esta técnica consiste en inyectar a alta presión agua, ácidos corrosivos y arena a miles de metros de profundidad, con la intención es producir fracturas en formaciones de esquisto / pizarra (shale), arenas compactas (tight), o gas metano en mantos de carbón (coalbed methane), allí donde se fueron almacenando los fósiles desde épocas inmemoriales.

La técnica aplicada en el fracking consiste en inyectar agua, ácidos corrosivos y arena a miles de metros de profundidad, con la intención de producir microfracturas en la llamada “roca madre”, allí donde se fueron almacenando los fósiles desde épocas inmemoriales.

La política oficial busca prolongar la matriz energética del país que sigue siendo fuertemente dependiente de los combustibles fósiles, los cuales son cada vez más escasos y generan mayores riesgos ambientales. Sin embargo, embarcarse en el uso del fracking sólo va a posponer un cambio necesario, generando aún más problemas.

La experiencia en Estados Unidos, por ejemplo, prueba que los impactos ambientales del fracking son graves y de corto plazo: contaminación de aguas subterráneas y superficiales con gas metano (las perforaciones van mucho más allá de las napas del agua potable, de tal modo que cualquier filtración, cualquier error puede contaminar las aguas que beben miles de personas); activación de fallas geológicas que originan movimientos sísmicos, impacto sobre la salud de las personas y los animales. Diferentes estudios científicos confirman la contaminación de agua, suelo y aire por exposición a químicos del fracking, así como la muerte de animales y malformaciones. Otros estudios dan cuenta que, contrariamente a lo que se afirmaba hace unos años, la extracción de gas y petróleo no convencional puede emitir incluso más gases de efecto invernadero que la explotación del carbón, generando una “huella de carbono” superior, potenciando el calentamiento global y la crisis climática.

Las controversias sobre el fracking llevaron a su prohibición en Francia y en Bulgaria, así como en el estado de Vermont (USA) y en Quebec (Canadá), mientras que en otros lugares se ha aprobado la moratoria (suspensión), tal como sucedió en Nueva York, y en varias regiones de Europa. Estas medidas se basaron en el principio precautorio, también presente en nuestra legislación, que indica que “cuando haya peligro de daño grave o irreversible la ausencia de información o certeza científica no deberá utilizarse

como razón para postergar la adopción de medidas eficaces, en función de los costos, para impedir la degradación del medio ambiente”. Es más, atento los daños ciertos de la actividad, en ciertas regiones las poblaciones apelaron directamente al principio de prevención, el cual obliga a las autoridades y a la sociedad a denegar una acción o actividad que implique efectos negativos sobre el ambiente y las poblaciones.

En Argentina, son varias las regiones y comunidades amenazadas e incontables los conflictos socio-ambientales que irán a sumarse a los ya existentes. Si bien ya se está aplicando este método en Neuquén, Chubut y Santa Cruz, a la lista se suma Salta y otras provincias sin antecedentes petroleros como Chaco, Santiago del Estero e, incluso, Buenos Aires. Inclusive se proyecta el uso de fractura hidráulica en Entre Ríos, lo que significa una seria amenaza de contaminación del Acuífero Guaraní, la reserva de agua dulce más grande de Sudamérica.

La resistencia de las poblaciones ya se ha hecho sentir, tal como lo prueban las propuestas de ordenanza y leyes de prohibición del fracking, así como las acciones de de amparo presentadas en numerosas ciudades y provincias, desde Entre Ríos hasta Santa Cruz, impulsados por Asambleas de vecinos, ONGS y representantes de algunos partidos políticos.

En cualquier caso, apelando al principio de prevención o al principio precautorio -ya aplicados en varios países-, en función de la experiencia global existente y dado los impactos que produce en la salud humana y el ambiente, nuestro país debe detener cualquier emprendimiento de este tipo, mediante una MORATORIA, esto es, a través de la SUSPENSION de esta modalidad de explotación en todo el territorio nacional.

Como artistas, intelectuales y trabajadores de la cultura, estamos convencidos de que no podemos apostar a nuestra propia destrucción. Frente a la llegada del fracking, que ataca la vida, los territorios, la soberanía, activemos el freno de emergencia

Detengamos el fracking  para investigar las consecuencias ambientales que esto trae.

Buenos Aires, junio de 2013

Primeras firmas:
Gustavo Cordera-Eduardo Pavlovsky-Selva Almada- Alcira Argumedo- Mireya Baglieto, Héctor Bidonde- Norma Bessouet- Alberto Binder- Miguel Bonasso- Adriana Budich- Gastón Burucúa- Ana Candioti- -Hugo Colello- María Sonia Cristoff- Nahuel Cruz- Diana Dowek- Fernando Fagnani- Mónica Galán- Roberto Gargarella- Lucy Edelman- Adolfo García Cardo- Laura Isola – Alejandro Katz- Diana Kordon- Daniel Link- Rubén Lo Vuolo- Ana Maldonado - Leonor Manso- Lucrecia Martel- Gabriela Massuh- Mirta Narosky- Susana Neuhaus- Luis Felipe Noé- Derli Prada- Noemí Paviglianiti - - Silvina Ramírez- Rosa Rovira - Francisco Ruiz - Alfredo Saavedra- Enrique Sardi- Horacio Safons- Beatriz Sarlo-Lita Stantic- Maristella Svampa- Rubén Szuchmacher – Fernando Vecchio- Enrique Viale- Patricia Zangaro.